Crónica de la excursión a Buñol (Valencia) de estudiantes de Erasmus+ y O-CITY

Por: Damaris Velázquez Labrada, licenciada en Arte de los Medios de Comunicación Audiovisual de la Universidad de las Artes de Cuba, y estudiante del Máster de Comunicación Transmedia de la Universidad Politécnica de Valencia -campus de Gandía-.

Buñol fue el anfitrión perfecto, donde gracias a O-CITY compartimos experiencias únicas, aprendimos de historia local, cultura, religión y disfrutamos un sinfín de fotografías y vídeos de las maravillas patrimoniales de este pueblo valenciano en el cual nos sentimos acogidos y con la necesidad de volver.

A 94 kilómetros de Gandia se encuentra Buñol, nuestro destino en la excursión con los estudiantes del grupo de Erasmus+ O-CITY Project de la Universitat Politècnica de València, Campus de Gandia.
Este proyecto se realiza durante los meses de octubre a diciembre, donde el alumnado con el objetivo de conocer, crear contenidos, salvaguardar y educar sobre el patrimonio material e inmaterial, lleva a cabo dos proyectos:

  1. Un proyecto individual donde cada estudiante prepara contenido multimedia (foto, vídeo, infografía, cómic, animación), sobre un elemento patrimonial de su ciudad o país de origen.
  2. Un proyecto grupal en el que cada equipo trabaja con un elemento multimedia y otro patrimonial de la ciudad.
 
Precisamente para realizar un proyecto grupal, se visitó Buñol.
Que comience el recorrido…
  • Primera parada: Castillo de Buñol, construido entre los siglos XI-XII, es de los pocos en España que se mantienen hasta la actualidad con viviendas en su interior. Desde este monumento se aprecia una vista panorámica del pueblo, donde los jóvenes se adentraron emocionados en los varios museos que aquí se dan cita.
  • Punto número dos de nuestro viaje: Museo de la Tomatina, dedicado a esta singular fiesta icónica de Buñol. Cuenta con una sala inmersiva de 270 grados en la cual pudimos disfrutar del ambiente y euforia de esta celebración que se realiza cada mes de agosto.

Entre imágenes y otros elementos, el visitante se sumerge en toda una vivencia de un pueblo en aquellas paredes. Lo más sorprendente fue la experiencia en la zona de realidad virtual, donde los estudiantes disfrutaron una verdadera batalla de tomates en primera persona gracias a las gafas. Quedamos atrapados por la magia del singular evento. Y con la invitación de participar en las próximas fiestas, por supuesto.

Entre callejuelas estrechas y empinadas llegamos a un nuevo destino: ubicado en la plaza del pueblo se encuentra el Templo San Juan Apóstol. Allí un peculiar guía, con una gracia auténtica, realizó un recorrido lleno de historias y esculturas. Fue un sitio ideal para mostrar las particularidades culturales de los estudiantes Erasmus, que expusieron cómo son los interiores de las iglesias en sus países.

Próxima parada: el cementerio civil y religioso, donde el respeto y la diversidad se evidencian en las 430 tumbas, de las que al menos 40 pertenecen a maestros masones. A través de las escrituras en las lápidas, símbolos y consignas, este cementerio es un recorrido histórico de los buñolenses.

Para finalizar la excursión, la alcaldesa María del Juncal Carrascosa Alonso, quien pasó un rato con los estudiantes, nos obsequió con camisetas oficiales de la Tomatina 2022. Buñol fue el anfitrión perfecto, donde gracias a O-CITY compartimos experiencias únicas, aprendimos de historia local, cultura, religión y disfrutamos un sinfín de fotografías y vídeos de las maravillas patrimoniales de este pueblo valenciano en el cual nos sentimos acogidos y con la necesidad de volver.